El camarero V es el hermano de la señorita B. Es muy fácil confundirlos, aunque no es tan alto como ella, pero su forma de hablar es igual.
Se pasa todo el día en el bar sirviendo vasos de naranjada y limonada. Acaba con dolor de pies, aunque usa zapatos cómodos.
La doctora le recetó unos días de vacaciones en un sitio tranquilo para que descansara de tanto trabajo.
La señorita b se ofreció a trabajar en el bar y cuando la oyó el señor estudioso dijo: "¡Qué raro, si habla como el camarero v!".
Y es muy complicado saber si las palabras se escriben con v o b. Sobre todo a los niños que no prestan suficiente atención.
El truco para que estos hermanos no nos confundan consiste en observar detenidamente las palabras cuando las encontramos en los libros o preguntarlo a alguna persona mayor, que os lo dirá encantada.
Ya podemos escribir palabras con v como: uva, oveja, llave, vela, violín, vaso, pavo....
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